LUCHEMOS POR UN MUNDO MEJOR DONDE NO HAYA IGNORANTES NI POBRES.

Uno no vive solitario, sino en sociedad. El desequilibrio entre ignorantes y enterados o sea educados, no es bueno para los unos, ni para los otros. En consecuencia para nadie. Puesto que por una ley socioeconómica tarde o temprano se producirá un efecto negativo destinado a compensar el exceso o el defecto, allí donde esté, entre los ricos o entre los pobres, entre los ignorantes o entre los cultos No es un fenómeno individual, sino social.
Pueden producirse movimientos políticos revolucionarios violentos. Tal como lo fue la revolución Francesa, que cambió el mundo absolutista anterior a ese trastorno.
Esos cambios tienden a compensar las diferencias, porque están destinados a equilibrar.
Seguramente, no lo van a conseguir, pues el sistema es inestable. Está sujeto a los vaivenes del desequilibrio, pero no les envidio el trote....... Que algunos van a correr...
Aparte de ello, actualmente se puede hacer mucho en materia de educación. Una causa excelente. La mejor. La que transformó bastante a Japón en el siglo XIX, la que en la Argentina produjo Domingo F. Sarmiento cuando trajo maestras Norteamericanas para iniciar el sistema de educación primaria obligatoria laica. En este país, en aquellos años, había predominio de analfabetos. Lego llegó un tiempo en que casi no hubo analfabetos. Lamentablemente, ahora se ha retrocedido.
DOMINGO F. SARMIENTO:

En muchos países a través de la legislación impositiva se fomentan cierto tipo de donaciones orientadas a solucionar problemas comunitarios presentes, y futuros. Merced al sistema impositivo se estimulan las contribuciones monetarias de los concentradores de riqueza (personas físicas o jurídicas) como ser las empresas grandes y medianas hacia obras específicas. En las que haya interés que los particulares se involucren, y aporten dinero: Por ejemplo, las donaciones a los hospitales, a las universidades, a la investigación científica, a la lucha contra algún flagelo humano, etc. Y mediante la herramienta de las exenciones impositivas, y el de la disminución de las sumas que se deberían abonar en concepto de impuestos.
Les conviene a estos particulares, al Estado como recaudador, y a todos en general.
A dichos particulares, porque en vez de darle al Estado esas sumas de dinero en concepto de impuestos, lo donan para una obra de bien. Lo que tiene el valor agregado que mejora la imagen de una empresa. Y se puede publicitar de distintas maneras.
Para esos Estados lo que importa es que las personas también inviertan parte del dinero ganado, y se involucren con el país a través una fundación, con una obra de bien común.
Al Estado le conviene porque si bien no recauda esas sumas - probablemente de todas formas no las percibiría - se ahorra la cantidad de dinero en cuestión para un proyecto, o una obra, que figuraría dentro de los gastos en el presupuesto de recursos y gastos.
En algún instante de la historia todos se van a dar cuenta que la mejor INVERSIÓN es la que se realiza en EDUCACIÓN, porque propende al progreso y a que vivamos mejor y en paz.
Con la EDUCACIÓN generalizada como POLÍTICA UNIVERSAL habrá más BIENESTAR, MEJOR CONVIVENCIA, y ADELANTOS INSOSPECHADOS.
Y lo último pero lo más importante, habrá más FELICIDAD para el individuo.
No puedes vivir bien, rodeado de ignorantes, o de pobres, por más que te encierres en tu residencia, por más que estés protegido/a por doscientas alarmas, y por un cuerpo de seguridad.
El mejor sistema para el bienestar general, y el más feliz, consiste en que nadie tenga necesidad de todo lo mencionado en el párrafo anterior.
LUCHEMOS POR UN MUNDO MEJOR DONDE NO HAYA IGNORANTES NI POBRES.

---&---
Escriba su comentario en comentarios: